Se utilizan para proteger equipos y instalaciones industriales contra sobrepresión de aire, agua, vapor, gases, fluidos viscosos y productos químicos en general.

  • Capacidad de caudal de hasta 100% mayor que en los diseños convencionales, el cual permite la aplicación de válvulas de diámetros nominales menores, bajo las mismas condiciones de operación;
  • Construcción sencilla y robusta, con pocos componentes internos, el que reduce la posibilidad de fallas, aumentando así la seguridad.